que he perdido la razón,
y habito en una soledad sonora,
con taytantos años,
maltrecho el corazón,
no vivo ni el ahora.
Tristeza en vena,
se seca la hierbabuena,
matojo inerte.
El alma hundida,
vive la mala vida,
esperando la muerte.
Ya no hay horizonte,
ni sol solano,
donde yo voy.
En el Sacromonte,
no quedan ni gitanos,
ya no sé quién soy.
Volvamos a la escuela,
para dejar las esquelas,
en el bloc como memoria.
Tu olor recuerda al tomillo,
desde que yo era un chiquillo,
estás en mi historia.
Se han apagado las velas,
donde las almas mamaron
la felicidad mía.
Se han gastado las suelas,
de un corazón que ataron,
porque te quería.
Triste corazoncito,
harto de tanto combate,
¿Por qué te extrañas?.
Ahora queda huerfanito,
en medio de un dislate,
lleno de legañas.
Reinas en la desgana,
con libertad lejana,
llena de tirabuzones.
Tu alma canta una saeta,
tu corazón está a dieta,
de amores de ocasiones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario