Vas a empezar a vivir un día triste,
Ellas manarán de tus propias fuentes,
Si tus mismas lágrimas son conscientes,
Es que honras lo que solita te hiciste.
Nadie te empuja pero tú resiste,
Mis daños colaterales consientes,
Tus hachazos permanentes no sientes,
Te lo recordé cuando lo volviste.
No me pongas ese rictus tan fiero,
Modula esa voz tan articulada,
Antes moría por ti, pero ya no muero.
No te quejes de vida transformada,
Sabes de sobras que no es lo que quiero,
No es fácil volver a vereda amada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario