En el último libro de Benjamín Prado, donde explica las vicisitudes de hacer el último disco con Joaquín Sabina, Lo niego todo, en las últimas páginas de ese libro, dejan abierta una canción para acabarla, con unos verso iniciales y a la cual ya la llaman "Lejana y Desnuda". Esta es mi primera aportación:
Versión 1.0
Cuando nos sabe la tarde a olvido,
Y hasta nos llueve sin mucha gana,
El futuro destroza el propio nido,
Y Cupido… se queda sin mañana.
Bébete el futuro de un buen trago,
Y haz lo que te venga de real gana,
El presente es tan solo un amago
De caricaturizar la desgana.
Y te quedarás por siempre lejana,
Y te quedarás por siempre desnuda,
No partirás ya ni tu propia pana,
Y te embargará una eterna duda.
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