hoy estoy mirando un destellante lucero,
hoy más que nunca me siento prisionero,
hoy, así, como el que no quiere la cosa.
Hoy más que nunca pido a la milagrosa,
hoy llevo en mi pecho el trino del jilguero,
hoy me has vencido sobre el tablero,
hoy se agitan en mis adentros mariposas.
Hoy hasta me huele a ti la fresca brisa,
hoy al pensarte se me dibuja una sonrisa,
hoy ya no te veo rematadamente remota.
hoy el amor de nuevo me florece,
hoy todo lo tuyo bien me parece,
hoy sufro tu ausencia gota a gota.
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