El alma del cántaro es la vanidad,
Inocua, un auténtico desperdicio,
Ser notorio por autentico vicio
Es como una vigilada libertad.
Digo que es malvivir, con sinceridad,
Es malgastar un momento propicio,
La vida es corta en su propio ejercicio,
Hay que disfrutarla en su totalidad.
Haz tu vida y no la que se te ofrezca,
Tu vida es solo tuya y de nadie más,
Así que vívela plena y a tu antojo.
En su momento haz lo que te parezca,
Nunca dejes que te piloten, jamás,
El peligro hay que mirarlo de reojo.
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