El uno de Octubre será el treinta de Febrero,
Las urnas malditas se llenan de podredumbre,
De a poco se le cae la careta al mensajero,
La única solución es hacer una gran cumbre.
Ni ser paganinis ni los eternos paganos,
Ni unos los samaritanos… ni otros los “Pilatos”,
Hay que llevar banderas sin llegar a las manos,
Hay que negociar lo negociable y firmar tratos.
Sin respeto a la ley no hay ninguna democracia,
Sin respeto a la ley triunfa la absoluta anarquía,
Sin respeto a la ley, queda la ley de la selva.
Olvidemos a los Mesías de ignorancia rancia,
Sus neuronas padecen de una severa sequía,
¡Diálogo y negociación para que se resuelva!
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