Como las olas del mar,
así es nuestro amor,
porque se viene y se va,
y tiene siempre su ardor.
Con la espuma de las olas
y su ruido de caracolas
y las almas con su clamor.
(18)
Cuando paso bajo tu balcón,
y te veo leyendo tranquilamente,
parece que se desboca mi corazón,
y el amor brota tan libremente.
Cuando estas asomada a tu ventana,
y con un guiño lanzas un beso,
es feliz toda mi semana,
y por eso paso, lo confieso.
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