Primera parte de un poema basado en una cancion de Sabina titulada "Mi primo el Nano"
Ando yo lejos de ser un maestro,
pero intuyo que es muy grande lo nuestro,
es bella música celestial para el oído,
y una manera de dejar sin tributo al olvido.
En tu no presencia mi mente te mira,
prometiendo mil veces que no es mentira,con el alma en pena y atorrante,
y un corazón que no desea ser trashumante.
Ando medio perdido en tanta espera,
esperando ser el conejo de tu chistera,
a veces me pregunto, ¿cómo se aguanta
tantos te quieros ahogados en su garganta?
Pero ya ves, no hay infranqueable frontera,
ni Torre de Babel que no se pueda subir,me toco la cabeza para tocar madera,
me ha tocado la única lotería del sufrir.
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