Y se me escapa sin querer un suspiro bendito,
Sueño contigo a diario, igual da donde durmiera,
Los sentimientos son tan duros como el granito.
Delantal que enjuga lágrimas, amarillento,
Como el sayo desgastado de una campesina,El camino andado es angosto y polvoriento,
Solo lo alegra el bello trino de una golondrina.
Ya tienes claros mis sentimientos inmortales,
Por eso me miras tantas veces con tu mirada fría,Del verde han pasado al rubio como los trigales,
En espera de que les digas que ha llegado el día.
Tanto sufrimiento y tanto llanto sobre pedregales,
Hincados en la piel del alma como finos aguijones,Desesperando en la espera de ver florecer los rosales,
Tirado y triste, olvidando todas las estaciones.
Por un beso doy mi compendio de soledades,
Para poder gritar al mundo que eres solo mía,
Por callejuelas y plazas de todas las ciudades,
Desde los Pirineos hasta mi bella Andalucía.
Tocada por tu pie es bendita toda la tierra,
por besar tus huellas me sonríe la suerte,aunque pierda todas las batallas y la guerra,
tu fuerte desamor me dará la única muerte.
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