El primer amor te picó como el aguijón de una avispa,
Te dejó la virginidad del alma hecha añicos,
Pero el corazón se te ventiló con mil abanicos,
Cuando fuiste hasta Granollers buscando a Chispa.
Hubo una fémina que le puso a tu vida colonia,
Una hembra que te sedujo allá por Inglaterra,
Pero volviste a poner pies en polvorosa, a tu tierra,
Y bajo la niebla y la lluvia dejaste sola a Sonia.
La madre de tus hijos fue tu “Hotel dulce hotel”,
Siempre volviste a ella cuando te dio la gana,
Una familia, más que de campanillas, de campana,
Nada tuviste más fecundo que el vientre de Isabel.
No quiero ni pretendo meter el dedo en la llaga,
Ni poner donde no me llaman a mis narices,
Pasa que a Mallorca le salieron muchas varices,
Cuando pienso que dejaste a la Zubillaga.
Tu bis Argentina, Bonaerense, te encerró en su jaula,
Le dejaste “Dieguitos y Mafaldas” tras que todo terminara,
Veinteañera escandalosamente joven la tal Seminara,
Bombón en “La Bombonera”, vacía en la multitud sin Paula.
Al final la pena con Jimena es menos pena,
Me alegro de que el crápula no se haya desorientado,
Tu vida alegre con corona se ha “Coronado”,
Vives de día corriendo la noche por tus venas.
La Virgen del Rocío se hizo carne, piel, hueso,
Y te marcó el mejor camino a hierro ardiente,
Tu voz se secó por momentos, rasgada de aguardiente,
Tan solo ser padre te hizo pasar por el aro, solo eso.
Por Londres nunca se te vio pasear con pamela,
Esos pasos bajo la lluvia los dejaste para el futuro,
Pasaste a ser millonario sin tener un duro,
La sonrisa y la felicidad te llegó al nacer Carmela.
Otra mina, otra Martínez, otra baba que chorrea,
Otro español que quiso hacer las américas cantando,
Entre tango y tango, Buenos Aires te fue enamorando,
Cuando pisaba los mismos adoquines Lucía Inés Correa.
C/ Jovara
06/01/17 – 12:40
No hay comentarios:
Publicar un comentario