Una sonrisa parapetada tras los cristales,
Una décima de segundo de intensas señales,
Sin decir ni mu, ni adiós, ni hasta mañana.
La esperanza es presa de la desesperanza,
El amor se ha vuelto un artículo de lujo,
De todas formas el alma siempre avanza,
con dirección firme a pesar de los flujos.
La historia vuelve con su machacona cadencia,
Esperar con tranquilidad es la única ciencia,
A pesar de unos días demasiado largos y amargos.
Algún día habrá luz al final del túnel oscuro,
Así acabará este negro futuro sin futuro,
Los sentimientos quedarán libres y sin embargo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario