¡Me voy!... No me calienta ya ésta lumbre,
Las cosas pudieron ser más hermosas,
Solo vemos las espinas sin rosas,
La frialdad se ha convertido en costumbre.
¡Me voy!... triste y con mucha pesadumbre,
Tus palabras me pesan como losas,
Por ser frías, hirientes y lastimosas,
Y tener cierto olor a podredumbre.
¡Me voy!... puedes quedarte muy tranquila,
Dimito de estar pendiente en tu mundo
Y de estar a tu lado y en tu corriente.
¡Me voy!... este burro ya no se trasquila,
No quiere ser el triste vagabundo
Que siga dándose golpes de frente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario