Te pienso a las orillas del río Guadalete,
Mi corazón te quiere con carácter honroso,
Pero a veces la razón como que se entromete,
Sin ti no puedo hallar ni la paz ni un mal reposo,
Dame una señal clara para que la interprete,
Mientras tanto piensa que ando muy triste y hundido,
Pero cuenta que mi amor nunca estará diluido.
12 ¿Sabes cuándo es cuando más alegre te gozaba?
¿Y cuándo más me apretaba el gris desasosiego?
Pues cuando tu alma conmigo no se arrejuntaba,
Parecía como que todo ardía en un fuego,
Pero resurgía entre llamas mi fe más brava,
Ya que quiero seguirte siempre como un ciego,
Este sentimiento con su bravura es bonito,
La cuenta de quererte tanto tiende a infinito.
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