Entre rosas rojas salvajes y almendros,
A la sombra de las hojas de las parras,
Sueño en la lejanía que te estoy viendo,
A esas me agarro en agonía que no para.
A lo lejos líneas de olivos centenarios,
Rectas, sin fallos, precisas y en armonía,
Salpicadas de higueras que en el imaginario,
Hacen saltar por los aires tu guerra fría.
Cuatro tejados de casas bien encaladas,
Completan una fotografía pintoresca
idilio de paisaje lleno de tranquilidad.
Zócalos grises y paredes con cal blanqueadas,
Sillas en los quicios de las puertas a la fresca,
En los pueblos se respira un aire de felicidad.
1 comentario:
¡¡¡uff de verdad que me emocionas con tantos detalles!!!, gracias por hacer de ese humilde rinconcito, unos “escritos" tan bonitos ,que hacen que parezca un lugar mas importante,
besitossssssssssssssss
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