Eres como la espuma de las olas del mar,
una tormenta encerrada en una botella,
tus besos apasionados me saben a sal,
tu corazón me plantea una querella.
Eres como la espuma de las olas del mar,
de un mar embravecido y precioso,
mi alma navega a lomos de la sal,
tu ritmo y tu vaivén desfoga a mi potro.
Eres la espuma de las olas del mar,
la calma chicha tras la tormenta,
el viento que da vida a mi veleta.
Eres la espuma de las olas del mar,
el algodón de las nubes del cielo,
y del atardecer, ese color de fuego.
No hay comentarios:
Publicar un comentario