316 LEVANTANDO EL TELON

Deseo que nuestros corazones levanten el telón

Y lleven a cabo la función más bonita del mundo,

Deseo que nuestros sentimientos sientan con fruición,

Un amor tan hermoso y tan profundo,

Al  juntarse dos almas que se aman sin parangón,

En la cima de las cimas del mundo.

Así es y se muestra mi corazón,

Que si no te ve se queda moribundo,

Se le nubla por completo la razón,

Y se encierra en el fracaso más rotundo.

315 ANDO VARADO

Ando varado últimamente en una playa,
Con tu nombre dibujado en la arena,
Las olas que van y vienen y se explayan
Con su espuma no lo borran, lo refuerzan.

Tu nombre queda pétreo e indeleble,
La erosión con su fuerza no lo castiga,
Es mi corazón el que queda endeble,
Porque tu olor en los vientos lo fustigan.

En la lontananza un barquito velero,
Me trae esperanza a borbotones,
Si veo subido en el  a tu salero.

El barco parece que se aleja en arreones,
Dejando atrás la playa y el embarcadero,
Mi cielo se llena de nubarrones. 

314 HAY TRIUNFOS

Hay triunfos que se consiguen,

Al sumar, al menos, dos derrotas,

Hay amores que se persiguen,

Y te hacen feliz a cuentagotas.

Hay mujeres que se dirimen,

Entre una peli y dos protas,

Hay quien quiere que lo fusilen

Con balas de amor a quemarropa.

Hay momentos en la vida que dividen,

Que se juegan con el as y la sota,

Y que parece que te fustiguen.

Hay amores con cuerpo de jota,

Que hacen que las almas se suiciden,

Poniendo los sentimientos en bancarrota.

313 ME GUSTARÍA

Me gustaría llevarte a mi pueblo,

Doblar contigo las esquinas donde me criaba,

Pasear con mi brazo por tu hombro, por su suelo,

Y confesarte que sin conocerte ya te soñaba.

Me gustaría retroceder en el tiempo,

Y volver a jugar por donde jugaba,

Para poder estar más días contigo,

Eso si que sería una buena jugada.

Me gustaría poder decirles a nuestros nietos

Que un día nos encontramos y fuimos muy felices,

Y que formamos un predicado con nuestros dos sujetos,

Me gustaría poder mirarte a la cara

Cada tarde, cada noche y cada mañana,

Y en las puestas de sol de cada madrugada.

312 ANTES QUE LA RUTINA

Antes que la rutina

Seque por completo el deseo

Y convierta nuestras vidas

En una corona de espinas

Sin rosas y sin jadeos.

Antes que la rutina

Arruine nuestras almas

Como el humo y la nicotina

Que se esparce por las esquinas

De tu amor cuando no me llamas.

Antes que la rutina,

Se nos lleve por delante

El ardor de nuestros besos,

De un amor tan incesante

Que se muere por tus huesos.

Antes que la rutina

Acabe deshojando el almendro florido

En el que nuestras almas se han convertido,

Recoja las hojas de la margarita

Y entendamos que no nos hemos perdido.

Antes de todo ello, decide,

Si quieres compartir tu vida conmigo,

Antes de todo ello persigue

Lo mismo que yo persigo,

Ya veremos quien ama más y lo consigue.

311 Y DE VUELTAS

Y de vueltas con que esto se acaba

Y de vueltas nos proponemos terminar,

Pero se nos cae una incesante baba

Cada vez que nos volvemos a mirar.

Así escribimos la historia de las páginas

De nuestros días más habituales,

Así se nos hacen eternas las noches frías,

Y los días transcurren interminables.

Echándote de menos con nostalgia

De los momentos tan felices vividos,

De los que perdemos y no podremos vivir,

Pensando en tantos minutos de liturgia,

En los que nuestros corazones unidos

Respiran y sufren en un verdadero desvivir.

310 EL VAIVEN DE LAS OLAS

Te advierto de que tengas cuidado

Porque no actuaré como si nada,

Aunque el ayer sea ya un pasado

Ni quiero ni  puedo olvidar tu mañana.

El mirarte siempre es pura alegría,

El no verte una gran decepción,

Nuestros sentimientos se van de romería

Cantando juntos la misma canción.

Solo con poder verte me das la vida,

Que alimenta mi alma y la vuelve sumisa,

Y así eres capaz de curar todas mis heridas,

Como hace, con amor, el mar con su brisa,

Juntando el vaivén de las olas partidas,

A veces despacio, a veces con prisa.

309 AHORA QUE SE TERMINA

Ahora que se termina de una vez,

Ahora que ya no quiere saber de mí

Ahora que pasa su último tren,

Ahora que llora desconsolada, fuera de si.

Ahora que la decisión parece firme,

Ahora que parece su fe inquebrantable,

Ahora que ya no quiere seguirme,

Ahora que mis minutos son infumables.

Ahora toma la decisión final,

De acabar con ésta preciosa historia,

Ahora que piensa que es la de verdad,

Ahora que no me quiere ni menos ni más,

Guarda su corazón bajo una Guardia de Pretoria,

Ahora que su razón piensa sin libertad.

308 ALGUN DIA LOS HISTORIADORES

Algún día los historiadores

Contarán la historia de nuestros días,

Algún día los soñadores,

Soñarán con tu vida y con la mía.

Algún día los exploradores,

Encontrarán nuestro futuro puesto

En algún lugar expuesto en aparadores,

Para que lo interpreten los expertos.

Ese día mirando al suelo sabremos,

Que hemos vivido la historia más bonita

Ese día tendremos los pies en el cielo

Y de nuestros corazones saldrán chiribitas.

Algún día en algún lugar,

Se deberán encontrar nuestras almas,

Y nuestros corazones se pondrán a jugar.

Ese día peinando canas,

Viviremos el resto de nuestras eternas vidas,

Sin volver a separarnos jamás.

307 A JOANA FRIGOLÉ ( UNA MIRADA DE PERFIL )

Tengo el lujo de tener una profesora

A mis taytantos años, lejos de la juventud,

Ella se preocupa, te habla y te asesora,

Y se ríe de las gracias de éste andaluz.

Con sus rizos al viento y su verbo medio,

Consigue comernos el coco con sapiencia,

En sus magistrales clases no hay tedio,

Todo lo contrario, encierra mucha ciencia.

El caso es que se espera con cariño,

Para disfrutar de su saludo, con un guiño,

Que llegue el curso que cada año toca,

Las horas pasan pero no se hacen eternas,

Te deja tomar un café y que estires las piernas,

Para que al final del día, la jornada parezca corta.

306 UN CARNAVAL DE BESOS

Vivimos un carnaval de besos que agonizan,

Una noria harta de subir hasta el cielo,

Y bajar sin frenos a los infiernos,

Con sentimientos que se alocan y se atizan.

Trazo de tiza que deja su rastro,

En un cielo estrellado de un mes de Marzo,

A dos metros del suelo sembrado de asfalto,

Que alquitrana a su vez el velamen de tu velero.

Decenas de besos al tendío del siete,

Donde los entendios aplauden la muerte

de dos corazones descorazonados.

Donde un frío velo enmascara a la fría suerte,

Del beso etéreo de la dama de hielo,

Que te muerde para dejarte por siempre inerte.

305 UN BRINDIS AL SOL

Tengo el corazón tan vivo,

Que acaba de ser enterrado,

Por no hablar, ya ni digo

Que no puedo estar enamorado.

A la vuelta de los responsos,

No he recibido ningún pésame,

Todavía huelo a incienso,

Todavía sueño con besarte.

Hoy tengo el alma arrodillada,

La razón empieza a estar cansada

De tantas dudas, de tanto si pero no,

No puedo seguirte más el juego,

He de atreverme, si me atrevo,

A despedirte con un brindis al sol.

304 QUISIERA GALOPAR CONTIGO

Quisiera galopar contigo

A lomos de mi viejo caballo de cartón,

Quisiera volver a ser un chiquillo,

Y volver a ser travieso y juguetón.

Volver a mirarte con la mirada limpia,

Sin censura, sin odio, sin traición,

Poder enredar tus cabellos en mis dedos,

Sin necesidad de llamarte la atención.

Quisiera jugar contigo de nuevo

Y embargarme de aquella ilusión,

No decirte adiós sino hasta luego.

Volver a tomarnos otra vez mil cortados,

Sin tener que separarnos nunca más,

Con las manos y los dedos entrelazados.

303 EL MUNDO DE LOS CUERDOS

Mi mal ganado buen genio,

Tu buena mala reputación,

Hacen que agudices tu ingenio,

Si  me haces las maletas del corazón.

Sin un beso de buenos días,

Sin un suspiro diciendo te quiero,

Así se nos va pasando la vida,

Cada vez estoy más triste y más muerto.

Rezando a diario a la Virgen del Desespero,

Brindando cada noche con tu copa vacía,

Muriéndome sólo entre sábanas de cuero,

La seda de tu lengua tan viperina,

Hace que me tome dos aspirinas,

Para poder volver al mundo de los cuerdos.

302 HACIENDO NUESTRO CAMINO

Cada vez que estamos juntos,

Acabas llorando instantes después,

Cada vez que hablamos de nuestros asuntos

Parece que estemos delante de un juez.

Cada vez que te digo que te quiero,

Me contestas igualmente, que tú también

Cada vez que hablamos de temas serios,

El tiempo se nos pasa con rapidez.

Cada vez que soñamos despiertos,

Nos despertamos sobresaltados y de golpe,

Con temores infundados e inciertos,

Cada vez que soñamos dormidos,

Encontramos uno en el otro el soporte,

Para seguir haciendo nuestro camino.