Me llega tu aroma y me embriaga,
Tu recuerdo me aprieta en mi pecho,
Te sueño tendido en mi lecho,
Y no puedo dejar de pensar en ti,
Es más, moriría por ti,
Por tan sólo un beso tuyo,
Por una mirada a escondidas,
Por un guiño tuyo a hurtadillas,
Por poder susurrarte: ¡vámonos a dormir!
Cuando el día se acaba y se apaga,
Recuerdo con nostalgia todo lo vivido,
Cada instante, pensando en el punto y seguido,
Y en lo que tendrá que venir,
Porque si no ¿ de qué sirve vivir ?
Si no es con la esperanza de volver a verte,
En definitiva, de poder tenerte,
Aunque solo sea en la distancia,
Apenas unos segundos a la semana,
En los que el corazón parece que se derrama.
Cuando el día se acaba y se apaga,
Cuando la noche llega recién aterrizada,
Es cuando más aprieta el diafragma,
Una sensación de vacío, de agujero negro
En el alma, que se convierte en desvarío,
En un querer y no poder estar a tu lado,
En un estar siempre ocupado,
pensando ¿dónde estas? y ¿qué estarás haciendo?
Mientras mi alma salta rota en mil pedazos,
Y la vida lentamente se va desvaneciendo.
1 comentario:
¿es tuyo? le noto un punto diferente
pero es ¡ SUPERIOR !
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