Más hermoso que nuestro amor
Bien sabía yo que un día,
Acabaría pasando lo que pasó.
Nuestras cuentas no se redimían,
Sin el ardor que me consumía,
Por querer ver siempre tu estrella
Por un amor blanco, claro y en botella.
Y aunque no me falta labia,
Para decirle mil veces que la quiero,
No dejo de sentir cierta rabia,
Por no poder gritarlo al mundo entero.
Nunca me daré por vencido,
Siempre la sabré estar esperando
Nunca me caerá en el olvido
Siempre la seguiré soñando.
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