Tu mirada limpia es mi cielo,
Pero no cubierta de escarcha,
Tus pesares son chuzos de hielo,
Clavándose en el fondo de mi alma.
Una estufa de leña es mi corazón,
Para que tu frío no necesite manta,
Por la ventana un rayo de sol,
Busca tu triste alma cada mañana.
No hay camino de regreso al pasado,
Ni viento que levante esas brasas,
Pasado mañana estuve enamorado,
Anteayer los higos ya eran pasas.
Se nos está pasando rápido la vida
Lo nuestro es una inmensa montaña,
A veces de bajón y otras de crecida,
No llega el momento en que se apaña.
Una flor no hace llegar la primavera
Pero ya empiezan a moverse las plantas
Tu y yo sabemos que no es lo que era,
Estoy en espera de ver lo que aguantas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario