De pie, bajo una escalera,
te vi una tarde muy fresquita,
yo no sabía quién eras,
desde entonces no te olvido,
una flecha traicionera,
me acertó de pleno, fue Cupido.
Oye chiquilla, que no te olvido,
Oye chiquilla, que guapa estás,
Oye chiquilla, ando perdido,
y me pregunto, ¿dónde andarás?
Y van pasando los días,
y no te vuelvo a encontrar,
y van pasando las tardes,
no hay más cera que la que arde,
mi pecho es pura sinfonía,
yo a ti te quiero cantar.
Cariñete, yo a ti te quiero,
cariñete, y es de verdad,
cariñete, por ti el cielo,
mi vida entera y nada más.
Hemos perdido el contacto,
ya no te puedo llamar,
se han perdido los cortados,
se han perdido los besos,
me siento traicionado,
sólo cargo con el peso.
Oye rubia, de mis entretelas,
Oye rubia, de mi amor,
Oye rubia, me tienes loco,
loco, loquito, del corazón.
El día que vuelva a verte,
cuando te vuelva a encontrar,
será mi día de suerte,
ya no te me apartarás,
porque sería la muerte
si te dejara escapar.
Oye cielo, como te añoro,
oye cielo, de mis sueños,
oye cielo, sin ti no vivo
loco perdío, ando de amor.
Oye vida, qué días más tristes,
oye vida, si tú no estás,
oye vida, que mi alegría,
se va contigo, si tú te vas.
Amor mío, amor de mi vida,
eres el faro, que a mí me guía.
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