Mi corazón se está quedando listo y sin pilas,
será que estoy haciéndome demasiado viejo,
voy a lomos de mil achaques y mil complejos,
ya no te sigo más desde las últimas filas.
Me enloquece espiarte a diario desde los balcones,
desde los balcones de palo de mi corazón,
aunque últimamente no me falta nunca razón,
cuando entre suspiros te pido más emociones.
Has instalado en la puerta de tu alma cañones,
que acechan muy de cerca mis grandes ilusiones,
de poder conversar tranquilamente contigo.
Aunque eres totalmente dueña de tus acciones,
creo que desvarías tomando decisiones;
ya no muero por ti, escucha lo que te digo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario