Ya tienes lo que querías
no llamarte, ni decirte buenos días,
pasando el tiempo lentamente,
sin salir ni un instante de mi mente.
Haciendo que los días sean interminables
que las horas parezcan que no pasen,
y solo por el hecho de hacerte feliz,
de sentir que al menos lo aparentas,
aunque seguro que tu corazón revienta
por no poder estar junto a mi.
Ya tienes lo que querías,
que te acompañe a estar sola
esta semana será pura agonía
te aseguro que a mi no me mola.
Ya tienes lo que perseguías,
que igual no es lo que querías,
pero por pura cabezonería,
lo vas a conseguir.
No voy a permitirme verte
ni tampoco el lujo de llamarte,
veremos donde llega el aguante
de nuestra voluntaria lejanía.
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