Con el Jazz, la sardana o una guitarra,
Si pones oído hasta oyes a una cigarra,
En su lago se hacen eternos los segundos.
Aquí florecen sentimientos profundos,
El amor se escribe con tiza y sin pizarra,
Y se graba a fuego con una cimitarra.
Aquí los corazones se tornan más fecundos.
Ser de Platja D´Aro es otra historia,
Se disfruta la vida con alegría,
Y su aire de mar cura cualquier herida.
Ser de Platja D´Aro es felicidad perentoria,
Es un no-sé-qué, es locura y algarabía,
Es saber saborear, sorbo a sorbo, la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario