Hace unas fechas nuestros vecinos gabachos, muy simpáticos ellos, nos dedicaron una serie de improperios de mala fe amparados en un supuesto sentido del humor que no se yo bien dónde lo esconden......Total, que se me ocurrieron unos versos que transformé en tres poemas. Aquí dejo el primero de ellos:
I
Cuando los vecinos hablan de dopaje,
no se hacen los suecos los franceses,
nos critican por oscuros intereses,
pero les falta mucho aprendizaje.
Hablan temerariamente de dopaje,
porque siguen recibiendo reveses,
merecen vivir bajos los cipreses,
su lenguaje es gratuito y salvaje.
Se mofan de nuestro fantasmal dopaje,
ellos lo conocen bien, es su paisaje,
nos tienen envidia, mal que les pese.
Que se enteren de que España no se dopa,
igual si que sabemos irnos de copas,
sabemos vivir mejor que los franceses.
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