He asaltado tus muros porque eres mía,
Ante mi arrojo lucen desmoronados,Tus negaciones son esfuerzos cansados,
Sabes que tengo mucha fuerza y valentía.
Aquella mujer tan de hielo se me derretía,
Mis palabras de amor la han descongelado,Finalmente sus favores me los he ganado,
Ya no hay más penumbras, luce la luz del día.
A veces he visto mi energía mancillada,
Mi amor reflejaba solo unos tristes despojos,Dando apariencia de ser bastante menos fuerte.
Antes de perderte lucharé con mi espada,
Quiero que veas mi amor delante de tus ojos,Alejado de ti solo me espera la muerte.
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