Sueño a diario que estamos juntos,
En un estado de felicidad difícil de describir,
Sueño que logramos unir todos los puntos,
Y tenemos una eternidad por descubrir.
Doblados sin rompernos, como los juncos,
Vamos aguantando entre tiras y aflojas,
Mientras los corazones truncos,
Aguantan los ciclos de las hojas.
Nuestros corazones en carne viva,
Se desgañitan sin alcanzar su sueño,
Pero la llama siempre se aviva,
Con unos besos de sabor sureño.
Amo ese momento en el que tu mirada se cruza
Con la mía, porque me llena de gozo,
El futuro nos está haciendo una chapuza,
Por eso este corazón está en pleno sollozo.
Vivo el día a día entre preciosas visiones,
Bellas estampas que me hacen sonreír,
Es difícil embridar tantas emociones,
Atadas en corto para no dejarlas salir.
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