Tantos años dándose inusitados tortazos,
soledades convertidas en rutinas,
tantos años soñando que sus brazos,
abrazan los besos que no le destinas.
Tantos años con el amor en los baúles,
escondidos sin tan siquiera reinar,
las telarañas hacen que sutures,
tantos meses con tanta necesidad.
Universidad para tontos: Pompeu i Fabra,
tan llenita de ovejas sin destino,
al poeta ya no le queda ni una palabra,
la industria edificaba un desatino.
En un campo les acusan de violentos,
el cabreo sube y es monumental,
por quejarse, ¡que se dejen ya de cuentos!,
esta vida nunca nos va a dejar ganar.
Tantos años de amores mal curados,
sueños de amor caiga quien caiga,
¡cuántos tristes meses han tardado,
en saber que sus corazones se dan la espalda!
varios libros de poemas flanquean su paso,
a pesar de ello aún no se ha visto la luz,
el corazón lo sigue teniendo preso,
y se muere por los huesos de ese Andaluz.
Abierto por rebajas, perro que ladra,
harapiento mendigo de las migajas,
soñando con que el círculo se les cuadra,
mientras las almas buscan su mortaja.
Y cada día brilla más fuerte la luna,
y piensan que se merecen un monumento,
para ello solo les falta un gramo de fortuna,
esperando de nuevo que amaine el viento.
Ya no les quedan más conejos en la chistera,
ni más versos que verter desde el alma,
el trajín de los días les desespera,
las noches son sosas, demasiada calma.
Después de tantos días de loco ajetreo,
el corazón amenaza con quedarse en ruina,
tanta sacudida le ha dado un buen meneo,
pero siguen sin encontrar la medicina.
Está claro que no cabe ya más milonga,
porque el futuro pasa por sus caderas,
al final no hará falta que se ponga
a cobijo dentro de las belicosas trincheras.
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