Es mujer y no ha hecho la mili,
Ni falta que le hace
Para saber de la vida,
Porque sus argumentos nacen
En las más profundas colinas
Donde los sueños pacen
En el regazo de la razón.
Tiene tan claros los conceptos
Tan buen corazón, las ideas tan claras,
Que a veces pareces un inepto
A su lado, intentando aguantar su mirada.
Te hace sentir tan bien, cuando te da la razón
Que hasta a su gran amiga del alma,
Se le pone piel de gallina en el corazón
Escuchándola cuando habla,
Con ella sobran las palabras
Es como un gran retablo
Se le entiende todo cuando calla
Dice mucho con pocos vocablos.
Mujer de sentimientos profundos
Y profundas convicciones,
Con un corazón tan grande
Que no cabe en un porta-aviones.
Es una gozada no hablar de fútbol con ella
Ni de cosas baladíes,
Es un reflejo de las estrellas
Sobre todo cuando sonríe.
El amor la dejó tirada
Y eso que no se lo merece
La trató con una patada
Le dio por donde mas escuece.
Pero resurgirá como el Ave Fénix
Porque a la gente buena
Siempre le llega su príncipe azul
Para sacarle el corazón de la alacena.
Solo me permito hacerle una súplica:
No cambies nunca, Pilica
Si recibes cariño, lo duplicas.
No intentes cerrar los puños,
A cada uno el amor le llega
Cuando le llega su turno.
Intenta que no te pille a contrapié
Intenta cogerlo a la primera,
Intenta que no se arrodille por tu querer
Que no se convierta en una quimera,
Como andas sobrada de entendederas
Seguro que lo abrazas al volapié.
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