Antes de encontrarte tan tardío en esta vida
No había tonos rojos, azules ni dorados,
Tu pelo al buen viento, el hoyuelo en tu barbilla
Ondean como Virgen de los Desamparados,
Nunca escamoteas una preciosa sonrisa,
Irradias luz a todo… iluminas a tu paso,
Atracada en un puerto de bravo mar sin prisa.
Pozo Alcón, Puente esperado de Todos los Santos
Esperanza con templanza, brisa mañanera
Rozando el sol matutino los verdes cipreses
Enhebrando la paz y la vida a su manera,
Zurciendo algunos bienaventurados despueses.
Mira el mismo océano su radiante mirar,
Oteando un horizonte siempre sonrojado,
Ríes hasta si pretendes simplemente llorar,
Eso lo bordas, ¡y nunca nadie te ha enseñado!
Niegas con aplomo y firme firmeza que al amar
O lo das todo o dejas tu corazón cerrado.
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