Sin yo querer soy letrado
De citas inoportunas,
Tuyas son todas, no algunas,
Que agrios argumentos me traen,
Las cosas a veces se caen,
Por propio peso y pasado,
Sin querer ser tu jurado,
Te cuento ahora, de seguida,
Que quiero cerrar mi herida,
Y este cuento tan pesado.
A todo tu ser me avine,
A capea y sin un rodaje,
No es que te plantee un chantaje,
Pero no soy actor de cine,
Yo pasaba, nunca vine
A arroparme en tu frio cuarto,
Ni doy por dar, ni reparto,
Más creo que en este momento,
No sirve ya ni un lamento,
En mi velero yo parto.
Debe acabar y terminar,
Ahora que somos fiables,
No busquemos más culpables,
Es hora del punto final,
Sin babero ni delantal,
No nos hagamos más daño,
Hablar claro no es engaño,
acabemos el partido
en tablas, con buen sentido,
sin atender aledaños.
Yo te amé por la vía sana,
Esperando en mi ventana,
Verte pasar en tu paseo,
Con cara de patito feo
Me quedaba te aseguro,
Me regalaste el pan duro
Tus besos sabían a poco,
Mientras me volvía loco
Tu castigo más oscuro.
Perdámonos este paso,
No liemos más el enredo,
Ni el miedo nos tiene miedo,
Te escribía cual Garcilaso,
Y nunca me hiciste caso.
Lo nuestro nunca fue nuestro,
No me va ser ambidiestro,
Cortémoslo de un buen tajo,
¡Mandémonos al carajo!
Para el amor no fui maestro.
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